La multinacional sueca ha pasado por alto una de las normas no escritas del diseño publicitario que dice: “no hace falta acertar con la tipografía, basta con no equivocarse”. Ikea ha decidido cambiar la tipografía que venía usando hasta ahora en sus comunicaciones y catálogos, Futura, por otra fuente preinstalada por defecto en todos los sistemas operativos, la Verdana.
La empresa optó por esta acción para ahorrar gastos en licencias de uso, pero no se dio cuenta de que con la pérdida de su identidad visual, ha perdido su esencia y aquello que le hacía diferente de cualquier otra empresa de muebles y decoración.
La empresa optó por esta acción para ahorrar gastos en licencias de uso, pero no se dio cuenta de que con la pérdida de su identidad visual, ha perdido su esencia y aquello que le hacía diferente de cualquier otra empresa de muebles y decoración.
(ANDREA HERRERO VILLAR)
0 comentarios:
Publicar un comentario